Perfecta inteligencia, eres razón
Redonda, bien trabada; tu pasión
Es la obra consumada, el puro obrar.
Naciste de la mente y, por ganar,
Nunca ahorras cuidados; el tesón
Sella todos tus pasos, vocación
Que quebranta barreras sin cesar.
Gloria, ingenio procreas, luz ardiente
Del obrar virginal, así orgullosa
Que nunca de varón tu ser consiente
La pasión unitiva y ardorosa.
No por unir a un dios tu cuerpo y mente
Serías tú más sabia o más hermosa.