El curso que viene toca hablar de héroes, de sabios y santos en una asignatura nueva: "Héroes, sabios, santos: figuras clave del Mundo Clásico. Empezamos con una heroína, Antígona, y con la tragedia homónima de Sófocles.
Queda aún tiempo. Pero más vale ir preparando las guías de lectura, como esta que presento ahora. Ojalá no les sirva solo a mis alumnos del curso próximo.
Sófocles,
Antígona (443/442 a. C.)
En la clase anterior a esta se habrán propuesto algunas cuestiones que ayudarán a los alumnos a situarse ante Antígona, buscando, si es preciso, información por su cuenta:
- ¿Qué sabemos de Sófocles, de su época histórica? (la aspiración de esta asignatura no es hacer ni historia ni filología; pero siempre se precisa un contexto mínimo).
- ¿Qué sabemos de Antígona y su leyenda? ¿Y de sus padres, Edipo y Yocasta? ¿Nos suenan los nombres de Eteocles y Polinices?
- Más en general: ¿qué nos parecen los mitos griegos y romanos?; ¿nos atraen o nos producen rechazo?
- Hay otra cuestión general que se ha de tener en cuenta antes de leer Antígona: la tragedia griega presenta peculiaridades que la distinguen del teatro actual; en ella alternan las intervenciones de los personajes y del coro; contra lo que pudiera parecer, las partes del coro trágico no son superfluas: se han de leer con atención y reflexionar sobre ellas.
Antígona, la protagonista de la obra, es un personaje que no cobra vida propia en la literatura griega hasta la aparición de la tragedia. Desde ese momento figura en diversas creaciones, conservadas o no, de los tres grandes trágicos, Esquilo, Sófocles y Eurípides. Entre esas tragedias la más importante es la Antígona (443 o 442 a. C.) de Sófocles (497/496-406/405 a. C.). Esta obra, representada antes de los dos Edipos de este autor (Edipo rey, hacia 429 a. C.; Edipo en Colono, 406/405 a. C.), se refiere a acontecimientos posteriores de la leyenda: ya se ha descubierto la verdad sobre Edipo (que, sin saberlo, mató a su padre Layo y se casó con su madre Yocasta) y este está muerto; entre tanto, sus hijos varones, Eteocles y Polinices, disputan por la herencia paterna.
Los dos hermanos de Antígona se enfrentan por el trono de Tebas. Tras darse muerte mutua, su tío Creonte, hermano de Yocasta y cuñado de Edipo, es el nuevo gobernante de la polis. Este ordena tributar honras fúnebres a Eteocles y dejar sin sepultura a Polinices, el traidor que atacó su patria tras congregar en Argos una coalición de siete caudillos. Antígona se niega a obedecer la orden de su tío, el rey, e intenta honrar al hermano proscrito.
La estructura y argumento de Antígona se puede sintetizar de la siguiente manera:
- En el Prólogo (versos 1-99) dialogan las dos hijas de Edipo, Antígona e Ismene, hermanas a su vez de Eteocles y Polinices. Antígona refiere a Ismene la orden de Creonte (se le han de tributar honores a Eteocles, el difunto rey de Tebas; en cambio, se prohíbe que se entierre a Polinices por traidor). Entonces le cuenta su plan para dar sepultura a Polinices. Ismene rechaza colaborar por miedo a las consecuencias, respuesta ante la cual Antígona reacciona de manera áspera. Sin sentirse ofendida, Ismene alaba a su hermana cuando esta sale y ella se queda sola en escena.
- Tras el prólogo, se presenta, en la parte de la tragedia llamada párodos (100-161), el coro de ancianos, que celebra la victoria tebana sobre los argivos.
- En el primer episodio (162-331) aparece Creonte, quien pronuncia un monólogo (162-222) en el que exhibe su poder total sobre vivos y muertos y hace pública su prohibición de enterrar a Polinices. Después se produce un diálogo (vv. 223-326) entre Creonte y uno de los guardianes que custodiaban el cadáver de Polinices; a este guardián le ha tocado en suerte anunciar que alguien ha emprendido la tarea de enterrar a Polinices de modo simbólico, cubriéndolo con un poco de tierra. Ante las amenazantes palabras del rey, el guardián expresa en un monólogo (327-331) su determinación de no volver a presentarse ante Creonte (por cierto: ¿es este un týrannos?).
- El coro canta el primer estásimo (332-375) en el que habla de la grandeza del hombre y su sumisión a Hades, dios de los muertos, y de la capacidad humana para obrar lo bueno y lo malo.
- Los personajes del segundo episodio (376-581) son el guardián, Creonte, Antígona e Ismene. Interviene primero el guardián, que trae detenida a Antígona (376-440). Entre los versos 441-525 se produce un diálogo entre Creonte y Antígona, quien justifica su acción por respeto a las “leyes no escritas” (ἄγραπτα … νόμιμα, 454-455); su tío le reprocha no haber cumplido con sus propias leyes. El gobernante culpa también de lo ocurrido a Ismene, quien ha vuelto a escena; tras una breve intervención del coro, Ismene se acusa de haber colaborado con su hermana y pide compasión para esta en tanto que prometida de Hemón, el hijo de Creonte y Eurídice; Antígona se irrita por la actitud de Ismene y Creonte no se cree lo que esta ha contado (531-581).
- En el segundo estásimo (582-625) el coro de ancianos reflexiona sobre las desgracias que los dioses hacen recaer sobre algunas familias, como aquella a la que pertenecen Edipo, sus antecesores y sus descendientes.
- El tercer episodio (626-780) presenta, primero (626-765), un diálogo entre Creonte y su hijo Hemón; este habla de buenas maneras con Creonte, para conseguir la libertad de Antígona e impedir que su padre cometa una acción injusta; sin embargo, solo consigue que su padre se enoje enormemente. En el diálogo posterior (766-780) entre Creonte y el corifeo, portavoz del coro, el gobernante decide matar a Antígona, no a Ismene, encerrándola en una cueva con un mínimo de comida.
- El tercer estásimo (781-800) canta el poder del amor.
- El cuarto episodio (801-943) comienza con un diálogo lírico (801-882) entre Antígona y el coro; Antígona lamenta su suerte, comparándola con la de la figura mítica de Níobe, y por un momento flaquea en su determinación. Sigue un diálogo (883-943) entre Antígona y su tío, quien la envía a la cueva en la que ha de morir (de un modo hipócrita se entiende que, al dejar que la joven muera de inanición, se diluye la culpa de Creonte); Antígona se justifica, en un tono más débil, por última vez.
- El cuarto estásimo (944-987) propone diversos paralelos de figuras del mito que sufrieron un destino parecido al de Antígona.
- En el quinto episodio (988-1114) aparece primero Tiresias, el adivino ciego, un clásico de la saga tebana (cf., p. ej., Edipo rey) que dialoga (988-1090) con Creonte; Tiresias anuncia que Polinices debe ser enterrado por voluntad de los dioses, pero Creonte, obcecado, se opone; el adivino se va tras lanzar contra Creonte un mal augurio: alguien de su familia morirá. Después (1091-1114), Creonte dialoga con el corifeo y el coro lo convence de que finalmente ceda.
- El quinto estásimo (1115-1154) es un canto en honor al dios Dioniso, al que se le pide que acuda a Tebas.
- La tragedia termina con el Éxodo (1155-1353). Un mensajero (1155-1182) anuncia al coro la muerte de Hemón. Al aparecer Eurídice en escena, le cuenta en detalle (1183-1243) cómo han muerto los dos jóvenes. El mensajero toma la palabra (1244-1256) tras marcharse la reina y habla con el coro sobre qué puede aún suceder. La tragedia concluye con un diálogo lírico del coro y Creonte (1257-1353), quien se lamenta por Hemón y, después, por Eurídice al enterarse de que esta también se ha suicidado; Creonte admite que su obstinación ha tenido la culpa de todo.
Algunas cuestiones a las que se puede atender al leer Antígona:
- El título griego de Edipo rey se debería traducir más exactamente como Edipo tirano. La obra que se ha leído, ¿se podría titular Creonte tirano?
- Por lo que dice Creonte en los versos 221-222 (“por vanas esperanzas / a los hombres perdió muchas veces la codicia”) parece que este personaje piensa que todos los hombres tienen un precio. ¿Se aprecia en otros lugares de la obra que tiene un mal concepto general de los hombres? ¿Y de las mujeres?
- La relación Creonte-Antígona. ¿Se puede decir que en el enfrentamiento entre los dos se contraponen la ley del estado y la ley de la familia? ¿O se debate, más bien, quién debe tener prioridad, la ley positiva o la ley natural, “no escrita”? ¿Se puede decir que Antígona es un ejemplo de “objeción de conciencia”?
- Lo que hace Antígona en su tragedia, ¿lo habría hecho por un desconocido? Obsérvese la relación de esta posibilidad con el hecho de que actúe pensando en la ley de la familia o en la ley natural.
- ¿Qué entiende Antígona por “leyes no escritas”? ¿Crees que es correcto afirmar que existen esas leyes? ¿Por qué?
- Muchas personas se han enamorado de un modo u otro de la figura de Antígona al ver o leer esta tragedia. ¿Es hasta tal punto atractivo su personaje? O, al contrario, ¿se aprecian en ella aspectos negativos que pueden pesar más que los positivos?
- "Puestos a enamorarse, yo preferiría enamorarme de Ismene". ¿Qué os parece esta opinión?
- ¿Cómo se puede caracterizar la relación Ismene-Antígona? ¿Y la relación Hemón-Antígona?
- ¿Qué imagen de la mujer transmite Sófocles en la tragedia? Presta atención a las figuras femeninas, cómo se definen al interactuar entre ellas y en su relación con los varones.
- ¿Es Antígona una heroína? ¿Por qué? ¿Cuáles son sus grandes aciertos y, si los hay, sus errores?
- ¿Se podría considerar también como héroe a Creonte o nos produce rechazo esta idea?
1 comentario:
Más allá de lo que representa la tragedia de Sófocles, Antígona es una de las figuras femeninas clave en el mito griego. Valga este breve comentario del autor del blog como entrada, por si alguien más se anima a la discusión.
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